Felipao –mi pequeño y amoroso hijo- busca, siempre, de la manera más insistente ayudarme en la cocina. Él es super goloso… y lo que más le gusta, son estas manzanas acarameladas. “Facilito papá, le pones azúcar y ya está”.
¡Nada se compara al beso que recibo cuando le preparo su comida y eso llena mucho mi corazón! La verdad es que aprovecho al máximo esos instantes y -como siempre digo- la cocina me permite generar los lazos más fuertes del mundo con él porque disfruta mucho cocinar.
Comparte esta receta. ¡ Tus hijos te van a amar por siempre!
- 4 tazas de azúcar blanca
- 2 taza de agua
- 5 gotas de limón
- 5 manzanas: rojas, verdes… las que más te gusten!
- 5 palos de bambú o como se les llama pinchos o chuzos
- 6 cucharadas de glucosa
- Colorante: el color que ellos elijan
En una olla, coloca el azúcar junto con el agua y las gotas de jugo limón, lleva a ebullición; una vez que hierva, baja a temperatura media-baja. ¡Aquí debes estar muy atento! para evitar que se cristalice la mezcla, entonces la llama no debe sobrepasar la altura del líquido. Luego, agrega la glucosa que permitirá al caramelo tener mayor elasticidad; cocina hasta que el azúcar llegue a punto de crack o lo que se denomina punto de caramelo.
Y el truco del punto de caramelo es el siguiente: agrega gotas del punto de caramelo en agua muy fría, si endurece por los bordes y en el centro –aún- está un poco elástico es el momento preciso para agregar el colorante.
Cocina la mezcla unos minutos más y realiza –nuevamente- la prueba en el agua fría. El caramelo -al tocar el agua- debe endurecer por completo para tener la firmeza de una paleta dulce por dar un ejemplo.
Saca del fuego el caramelo, y si quieres que quede liso sobre las manzanas espera unos minutos para que el azúcar repose; en mi caso las manzanas van con burbujas porque a Felipao le encanta esa sensación que “al morder revientan”.
Sumerge las manzanas en el caramelo, quita el exceso frotando las manzanas en el borde de la olla y colócalas en una superficie plana, deja enfriar las manzanas y ¡listo!
¡Sabroso y en su punto!