Ir con los amigos -al estadio- a ver un buen partido es una de las cosas más ricas que tiene la vida; sin embargo, más allá del fútbol, disfruto –enormemente- comer ahí porque, casi todo, se convierte en un ritual infaltable.
En el estadio, dentro del Top 5, están la guata -codo a codo- con las empanadas de morocho y ese delicioso ají; las papas con cuero; últimamente, las papas con fritadita que tienen lo suyo y -algo que nunca puede faltar- ese helado que se te pega a la lengua.
La mejor guata del mundo la hace mi madre. ¡Es una cosa de locos, la sencillez y la armonía de su plato… es de otro planeta! Cada vez que la visito le pido que haga guatita. La manera que ella la prepara es –completamente- distinta a esta receta porque su forma de hacerla es la serrana: solo cebolla blanca, a diferencia de ésta que es la manera costeña: cebolla colorada, pimiento, ajo, tomate, etc.
Próximamente, haré la receta de Magolita, mi madre; en todo caso te comparto esta deliciosa receta.
- Aceite de achiote
- 1 cebolla colorada mediana picada finamente
- 1 pimiento mediano en cubos pequeños
- 2 ajos picados
- c/n de sal
- ½ cucharadita de comino
- 1/3 cucharadita de orégano
- 1 tomate mediano rallado
- ¼ atado de cilantro
- 1 ají entero
- 1 ½ tazas de líquido de cocción de la guatita
- 2 tazas de guata cocinada cortada en cubos de 1, 5 cm
- ½ taza de leche
- ¾ taza de pasta de maní
- 1 taza de papas cocinadas en cubos medianos
Antes de cualquier cosa, lava -muy bien- la guata con vinagre y limón; luego la cocinas en la olla de presión con agua, ajo y cebolla colorada, durante 25 minutos desde que la válvula de la olla suena o hasta que quede suave; luego cortas la guata en cubos de 1,5 cm y reservas con el agua por separado.
Prepara un refrito con aceite de achiote, cebolla colorada, pimiento verde, ajo, sal, comino, orégano y sofríe durante 3 minutos aproximadamente; agrega el tomate rallado y el sachet criollo (cilantro y ají) y cocina hasta que el refrito casi seque; adiciona la guata y su líquido de cocción que fue reservado, lleva a ebullición -a temperatura media- todos estos ingredientes.
Aparte, licua la leche con la pasta de maní y luego agrega a la preparación de la guata; mezcla –constantemente- para que no se asiente el maní, por último, agrega las papas cocinadas; rectifica -tanto en consistencia como en sabor- y sirve acompañado de lo que te guste.
Las guarniciones más utilizadas son: arroz, maduro frito, aguacate, tomate, lechuga y huevo duro; en Guayaquil suelen servirla acompañada de un limón y queda super bien.
¡Pilas gente a preparar esta guatita!